Y los cuatro animales tenían cada uno por sí seis alas alrededor, y de dentro estaban llenos de ojos y no tenían reposo día ni noche, diciendo: Santo, santo, santo el Señor Dios Todopoderoso, que era, y que es, y que ha de venir. Apocalipsis 4.8
Oseas
Participe da nossa comunidade
Facebook
Twitter